Nació en la cuna de los grandes compositores, artistas y filósofos. Stefan Vladar es compatriota de Mozart, Franz Schubert, Johann Strauss y otros que han marcado un hito en la música sinfónica. Siguió los pasos de su padre e incursionó en el mundo artístico desde los 3 años, cuando tuvo su primer contacto con grandes directores y solistas.
Sin embargo, haber ganado el concurso internacional Beethoven en Viena, en los años 80, lo catapultó hacia el éxito, de tal manera que actualmente Vladar, director y pianista, es considerado uno de los personajes más importantes de Austria., pues su carrera ha tenido como protagonistas a grandes directores del siglo XX, como Claudio Abbado, Yehudi Menuhin, Simon Rattle y Seiji Ozawa, con quienes debutó como pianista, faceta en la que se ha destacado por su interpretación de obras de Beethoven y Mozart.
En su papel de director, el maestro Stefan ha dirigido las orquestas Sinfónica de Viena, Camerata Salzburg, Filarmónicas de Stuttgart y de Essen, la Mozarteumorchester de Salzburgo.
Su discografía incluye más de 30 discos para sellos discográficos como: Harmonia Mundi y Sony Classical, donde se documenta su trabajo como pianista y como director con obras de grandes exponentes de la música clásica como Haydn, Schubert, Schumann, Chopin, Prokofiev y Scriabin.
Este fin de semana, con dos conciertos: el viernes, a beneficio de la Fundación Unión, y el sábado, Stefan Vladar estará como director y solista invitado con la Orquesta Filarmónica de Bogotá, dirigirá desde el piano El Concierto para piano y orquesta de Beethoven, presentación que para él es la representación del multiculturalismo musical.
Orquesta Filarmónica de Bogotá:¿desde cuándo comenzó con la música y a tocar el piano?
Stefan Vladar: Mi padre siempre fue un amante de la música y quiso aprovechar cada momento de su vida para disfrutarla, pero también era consciente que tenía que pasar algún tiempo con sus hijos. Yo tengo dos hermanos, así que lo que él hizo fue ponernos a escuchar los conciertos en casa y a explicarnos su significado.
De esta manera, crecí con la música clásica, casi desde mi primer día. Empecé a ir a conciertos desde los 3 años, escuchando y viendo a grandes directores y pianistas. La música ha sido parte de mi vida y para mí fue algo normal como lo es para otros niños jugar fútbol.
OFB: ¿Para usted qué significó haber ganado el concurso internacional Beethoven en Viena?
Stefan Vladar: yo era muy joven y fui muy afortunado de haber tenido el primer puesto. De hecho, cuando lo gané estaba más sorprendido que todo el mundo. Este concurso fue muy importante, porque me dio la oportunidad de poder tener algo de renombre; fue el inicio de mi carrera. Sin embargo, desde ese entonces ha sido duro y un reto seguir subiendo paso a paso.
OFB: háblenos un poco de una de sus pasiones, el piano.
SV: Yo diría que más que la pasión por el piano es la pasión que tengo por la música. Aprendí a tocarlo cuando era un niño, fui creciendo y me volví pianista, pero siempre mi pasión han sido las orquestas como tal, con todos los colores que tienen los distintos instrumentos, por eso cuando interpreto el piano trato de crear diversos colores, lo cual no es muy común en la interpretación de este instrumento.
OFB: ¿Cuál ha sido la experiencia más importante en su vida artística?
SV: no sabría decirlo con exactitud, porque hay varios momentos importantes. Me acuerdo, tal vez, de un concierto en el que toqué por primera vez con Claudio Abbado, fue a finales de los 80 en Viena. También recuerdo mi colaboración con la Camerata de Salzburgo; fue muy importante. Además, cuando conduje por primera vez una orquesta sinfónica.
OFB: Es su primera vez con la OFB. En ese sentido ¿Cuál es su expectativa del concierto?
SV: Me parece muy interesante cómo la música de Europa central, en términos culturales, puede estar en cualquier lugar del mundo. Para mí es muy natural estar en Colombia con músicos locales y poder trabajar sobre un compositor ruso, siendo yo de Viena, porque la música es un lenguaje universal que hablamos los músicos de todos los continentes.
OFB: ¿Por qué el público de Bogotá no puede perderse este concierto?
SV: Es algo muy especial, porque yo ya he estado dos veces acá en Colombia con los festivales de Mozart y Beethoven. La última vez, en el Festival de Mozart, estuve con mi orquesta de cámara de Viena. Y ahora escuchar a un músico de Viena y un músico de Rusia con una orquesta de Colombia es bastante interesante.