Actualidad

Heredero de una larga tradición en la gestión cultural, David García Rodríguez asumió la dirección general de la Orquesta Filarmónica de Bogotá, la entidad cultural con mayor reconocimiento de la ciudad. 

David García, quien es doctor en historia y magíster en filosofía de la Universidad de Viena, Austria, conoce a profundidad la entidad que dirigió en el periodo 2013-2015, cuando bajo su gestión nació un sistema de orquestas juveniles e infantiles y un proyecto educativo que se ha convertido en un referente de innovación nacional.

Sus vínculos con la Orquesta se remontan a la creación de la Filarmónica, un proyecto gestado por su padre, Raúl García y Mario Posada, entre otros músicos y personalidades, en agosto de 1967. 

En esta nueva oportunidad, García plantea un nuevo impulso a las actividades y proyectos de la Orquesta, como la expansión del proyecto de fomento en los colegios del distrito, donde actualmente acoge a más de 25.000 niños y adolescentes. 

“Mantendremos a la Orquesta Filarmónica Juvenil, Orquesta Filarmónica Juvenil de Cámara y el Coro Filarmónico Juvenil. Al mismo tiempo fortaleceremos la Banda Filarmónica Juvenil y crearemos dos agrupaciones más con énfasis en música colombiana; así llegaremos a nuevos públicos con más música y nuevas orquestas”, aseguró David García. 

Entre sus planes también se destaca llevar más conciertos a escenarios no convencionales como parques, iglesias y calles, garantizando uno de los pilares de la entidad, la democratización de la cultura musical. 

“Para la Orquesta Filarmónica de Bogotá es importante interpretar las obras de los compositores colombianos, quienes tendrán un espacio importante en nuestra programación, sin dejar de lado el legado musical universal y latinoamericano”, enfatizó.

A lo anterior se suma su propósito de convertir a la Orquesta Filarmónica de Bogotá en un referente nacional e internacional y el de llevar a feliz término el proyecto de la sede de la entidad, que es una prioridad para la actual alcaldía.

David García perteneció a la Orquesta Sinfónica Juvenil de Bogotá, fue instructor de apreciación musical en la Sommer Akademie de Sakyntos, en Grecia, productor y organizador de numerosas producciones musicales y conciertos, y codirector del documental Ciudad Bolívar: mosaico de una realidad.